¡Qué tarta de boda tan original! Quien la regaló tenía muy clara la temática. Y es que los diseños de estas tartas, no se acaban nunca, gracias a vuestros gustos, vuestras aficiones, vuestras historias...
Había pensado realizar las pajaritas de un modo más simbólico, más planas, pero justo cuando tenía que ponerme a ello, coincidió que mi hija trajo una de papel hecha en el cole. Hacía mucho tiempo que no las hacía, así que tuve que reaprender. Me valió para la tarta y para practicar con mi niña. Probé si salían con pasta de azúcar, haciéndolas como si fuesen de papel, y... aquí las tenéis. Un poco más difícil, pero también más reales. Para quien quiera intentarlo, mitad en pasta de flores y mitad fondant. Teñimos del color deseado, y estiramos la masa fina. Recortamos el cuadrado y con cuidado, a doblar. Cierto que se deterioran algo más, pero ahí están. Debemos dejarlas secar de un día para otro, ayudándonos de papel de cocina o similar para que no se aplasten, y para sujetarlas a la tarta, podemos utilizar unos trocitos de espaguetis escondidos o unos palillos.
Por dentro, todo un clásico en vainilla y chocolate con leche.
Muchas gracias por el encargo, y les deseo muchísima felicidad a la pareja.
No hay comentarios:
Publicar un comentario